Querer

Hace más de tres años que vi CLOSER y ya en ese momento me impactaron algunos de sus ingeniosos y mordaces diálogos y giros inesperados en la historia (aparte, como no, de Jude Law, que en esta película está espectacular).

Pero… A lo que iba. Algunos de sus diálogos, en momentos de tensión que provocan tumbos en el hilo argumental de la trama, no tienen desperdicio. Podría enumerar muchos, y posiblemente en otra ocasión lo haga, pero de momento me quedo con una frase que Dan (Law) le dice a Alice (Natalie Portman) cuando está dejándola por Anna (Julia Roberts). Alice le pregunta porqué la quiere, y Dan le responde:

“La quiero porqué no me necesita”.

Cuando vi la película por primera vez estaba en un momento de mi vida completamente distinto al de ahora y no me quedé con esta gran verdad. Mi neurona no supo captar cuanta realidad había en esas simples palabras.

Hoy he vuelto a disfrutar de la película, en una tarde lluviosa en qué me apetecía una buena dosis de dureza verbal. La he visto después de mucho tiempo, he disfrutado más de ella que entonces, si cabe… porqué he entendido mucho más que entonces.

Las situaciones que uno vive moldean su visión sobre las cosas y en este caso, como no podía ser de otra forma, ha sido así.

Para querer a alguien debo “notar/sentir/saber” que no me necesita. Que no reclama mi atención el 100% del tiempo, que puede (y disfruta) viviendo SU vida al margen de mi, aunque también conmigo… que tiene sus amigos, sus aficiones, sus gustos y sus ideas… al margen de mi, aunque pueda compartirlas conmigo.

Y, cuando es posible, se juntan ilusiones y proyectos comunes para seguir adelante con una relación de tu a tu, de respeto y confianza, de aceptación y estima.

Eso es para mí, ahora, el amor. Querer a alguien es querer que sea ese alguien, que se desarrolle en todos sus ámbitos, que tenga su parcela personal e intransferible… Todo ello sin ataduras ni esquemas preestablecidos. Todo ello como a mi me basta: queriendo y queriendose.

Lo sé, puede que no sea muy “normal”, pero así soy yo. Ahora y aquí, justo cuando el gris del cielo oscurece y deja paso a la ténue luz de las estrellas.