martes, 23 de noviembre de 2010

Rufo's day

Hay días que no se pueden olvidar. Días que te sorprenden y dejan huella. Días que marcan un antes y un después. Como éste sábado.

Nos fuímos al Pallars a pesar de la méteo, que no era nada halagueña. Llegamos a mediodía a Àreu y, mientras nos calzábamos las botas, apareció un perro oscuro y peludo, con cara de bonachón. Mochila a la espalda, camelbag llena de agua. Empezamos el camino, con el perro a nuestro lado.

Pasaron las horas, nos hizo reír, emocionarnos, sentirlo cerca. Nunca antes me había sentido así por un animal desconocido. Estuvo a nuestro lado en todo momento, atento a todo aquello que le decíamos, dándonos cariño y compañía. Se hizo querer.

Por la noche tuvimos que separarnos, justo después de saber que aquél a quién apodamos Tor se llamaba, en realidad, Rufo. Un perro como pocos, que protagonizó un día inolvidable.

Hasta muy pronto, Rufo. Prometo traerte un bocadillo de jamón y queso solo para ti.

7 comentarios:

karkajadas dijo...

Alegre,jugueton,ovediente...y gloton,jejeje. :)

El lugar,magico...la compañia,inmejorable.
Pronto,ese bocadillo de jamon,y mas y mejor.
Bso.

Carlos Hervás dijo...

Areu,buen lugar,con su Monteixo y su dura subida en la Cuita el Sol.
Un saludo.

Diego dijo...

Estos perretes son más listos que el hambre...Y a hablando de hambre...¿he oído jamón? ñaammmmm.

El que no arriesga, no gana ;-) A pesar de la méteo, veo que de lujo.

Besos.

Unknown dijo...

Jajaja! Qué monada por favor!! Me ha aliviado saber que Rufo tenía un techo dónde pasar la noche :)
Cuando vuelvas avisa y le llevo unos amigos peludos, ya sabes...

Becki dijo...

KARKAJADAS: Pronto... MUCHO MáS! Ya saaaaaabes, hay mucho currele por ahí! gracias por la compaaaaaañía, apañero!!!! ;)

CARLOS: El Pallars nunca deja indiferente... Un beso!

DIEGO: En todas partes encuentras "cosas" interesantes, a ver cuando acompañas al apañero y te vemos por aki jeje!!!!

ROSANA: Cuando quierasssss, preciosa ;)

Historias de montaña dijo...

Qué hay Becki!

Me ha recordado a las dos veces que he estado en Peña Ubiña, que se nos juntaron varios perros y en la primera hasta llegaron a escalar el primer largo con nosotros...fantaseando pensamos que podrían ser almas de escaladores reencarnadas en ellos ;)

Besos!

Becki dijo...

HISTORIAS: Los perros, esos amables compañeros de fatigas que, a cambio de un poco de estima, te dan momentos inigualables...

Un besazo, nen!